Bebidas endulzadas artificialmente en el embarazo
El consumo diario de bebidas endulzadas artificialmente por las mujeres durante el embarazo puede estar vinculado con un mayor A�ndice de masa corporal (IMC) del bebA� y con un mayor riesgo de tener sobrepeso en la infancia temprana, segA?n concluye un artA�culo publicado en ‘JAMA Pediatrics’.
La obesidad puede tener sus raA�ces en la vida temprana con mA?s del 20 por ciento de los niA�os en edad preescolar clasificados como con sobrepeso u obesidad. El azA?car aA�adido se vinculada con la obesidad y como consecuencia son populares los sustitutos de azA?car o edulcorantes no nutritivos.
La literatura sugiere que el consumo crA?nico de NNS puede aumentar, paradA?jicamente, el riesgo de obesidad y enfermedades metabA?licas, pero se sabe poco sobre el efecto de la exposiciA?n a NNS durante el embarazo. Meghan B. Azad, de la Universidad de Manitoba, en Winnipeg, CanadA?, y coautores estudiaron a 3.033 parejas de madre-hijo para examinar la asociaciA?n del consumo de bebidas endulzadas artificialmente durante el embarazo y sus efectos en el IMC de lactantes durante el primer aA�o de vida.
Se empleA? un cuestionario sobre alimentaciA?n para evaluar la dieta durante el embarazo y se midiA? el A�ndice de masa corporal infantil cuando tenA�an 1 aA�o de edad. Los autores informan que la edad media de las mujeres embarazadas fue de 32,4 aA�os. Para los bebA�s, la puntuaciA?n del IMC promedio (que mide las desviaciones en el IMC) fue de 0,19 hasta 1 aA�o de edad y el 5,1 por ciento de los bebA�s tenA�a sobrepeso.
MA?s de una cuarta parte de las mujeres (29,5 por ciento) informaron de consumir bebidas endulzadas artificialmente durante el embarazo, incluyendo el 5,1 por ciento de las mujeres que informaron tomarlas todos los dA�as. Los resultados del estudio indican que el consumo diario de bebidas endulzadas artificialmente, en comparaciA?n con ninguna ingesta de este tipo de bebidas, se asociA? con un aumento en la puntuaciA?n del IMC para los lactantes y dos veces mA?s riesgo de un bebA� con exceso de peso al aA�o de edad.
El consumo de bebidas azucaradas no se asociA? con puntuaciones del IMC para niA�os. Los autores reconocen entre las limitaciones del estudio la posibilidad de error en los resultados de la informaciA?n sobre la dieta aportada por las madres, ademA?s de que el estudio no puede demostrar una asociaciA?n causal.
«Hasta donde sabemos, nuestros resultados proporcionan la primera evidencia en humanos de que el consumo de edulcorantes artificiales durante el embarazo puede elevar el riesgo de sobrepeso en la primera infancia. Dada la actual epidemia de obesidad infantil y el consumo generalizado de edulcorantes artificiales, hacen falta mA?s investigaciones para replicar nuestros hallazgos en otras cohortes, evaluar NNS especA�ficos y resultados a largo plazo, asA� como los mecanismos biolA?gicos subyacentes», concluyen los autores.
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