BA?squeda y captura de bacterias superresistentes

Abril 2015.- El mal uso de los antibiA?ticos y la apariciA?n de bacterias resistentes preocupan cada vez mA?s a las autoridades sanitarias. Un reciente informe de la OrganizaciA?n Mundial de la Salud alerta de que las consecuencias ya se empiezan a notar, y pueden ser muy graves. Dos premios millonarios recompensarA?n a los investigadores que consigan aportar soluciones, financiados por la UniA?n Europea y la FundaciA?n Nesta. Los galardones llevan el nombre de Longitud, que ya se creA? hace cuatrocientos aA�os.

A finales del siglo XVII, media Europa buscaba una soluciA?n para el que era entonces uno de los problemas cientA�ficos de mayor interA�s: el de la longitud. En aquellos tiempos de largas travesA�as marA�timas, la determinaciA?n precisa de la posiciA?n de un barco en alta mar cobraba vital importancia. La latitud podA�a medirse con facilidad observando el Sol o las estrellas, pero para calcular la longitud era necesario utilizar un reloj muy preciso, y los aparatos de pA�ndulo de la A�poca no eran efectivos por culpa del movimiento de las naves.

Los reinos espaA�ol y holandA�s ofrecieron recompensas a quien lograra resolverlo, pero nadie fue capaz. En 1714, la corona britA?nica creA? el premio Longitud dotado con 20.000 libras para aquel que encontrara una soluciA?n. Hubo que esperar unos 50 aA�os hasta que el relojero britA?nico John Harrison fabricA? un reloj portA?til de gran precisiA?n que le hizo merecedor de la recompensa.

El pasado aA�o, con motivo del 300 aniversario de la creaciA?n del premio, la fundaciA?n britA?nica Nesta rescatA? aquella idea y decidiA? premiar con 10 millones de libras (14 millones de euros) a quien solucione el problema cientA�fico mA?s importante de nuestra A�poca.

Lo primero ha sido escoger el reto entre seis: volar sin daA�ar el medio ambiente, acabar con la resistencia a antibiA?ticos, mejorar la vida de personas con demencia, asegurar el acceso de todos al agua potable y garantizar a todos una alimentaciA?n nutritiva y sostenible. En el verano de 2014 se eligiA?, por votaciA?n de los ciudadanos britA?nicos, la lucha contra la resistencia a los antibiA?ticos. Ahora los candidatos estA?n pasando una primera fase de evaluaciA?n, proceso que se repetirA? cada cuatro meses hasta dar con el ganador. El plazo para resolver un problema de tal calibre es largo: finales de 2019.

TambiA�n la ComisiA?n Europea ofrece, dentro de su programa Horizonte 20-20 patrocina premios a la innovaciA?n. Uno de ellos, dotado con un millA?n de euros, tiene como objetivo acabar con la resistencia provocada por el mal uso de los antibiA?ticos. El plazo para participar estA? abierto hasta el 17 de agosto de 2016.

Es sabido que los antibiA?ticos se utilizan para acabar con infecciones producidas por bacterias, pero su abuso puede provocar un proceso de selecciA?n natural, haciendo que sobrevivan las que gracias a alguna mutaciA?n genA�tica sean inmunes al fA?rmaco. Esas bacterias resistentes se multiplicarA?n, transmitirA?n esa ventaja evolutiva a sus descendientes y darA?n lugar a grupos de microorganismos contra los que el antibiA?tico se vuelve inA?til.

Pero el problema de las bacterias resistentes no es solo el aumento de la mortalidad, sino que puede alargar las estancias hospitalarias, lo que multiplica el riesgo de nuevas infecciones y el gasto econA?mico, que en Europa se estima en unos 1.500 millones de euros anuales por esta razA?n.

Aunque la apariciA?n de bacterias resistentes es inevitable, y se produce aun cuando el uso de los medicamentos es adecuado, las malas prA?cticas, tanto de los pacientes como del personal sanitario, aceleran el proceso. Prescribir antibiA?ticos cuando no son necesarios a��por ejemplo en infecciones que son causadas por virus, como la gripe o el resfriadoa�� , tratar de adquirirlos sin receta en farmacias, usar en exceso antibiA?ticos de amplio espectro o no cumplir con las dosis y duraciones de los tratamientos prescritos son las malas costumbres mA?s habituales.

La administraciA?n preventiva, excesiva o incorrecta de antibiA?ticos a animales contribuye a la apariciA?n de cepas de bacterias resistentes. Esas bacterias pueden acabar transmitiendo los genes que les otorgan la resistencia, mediante un proceso de transferencia horizontal, a otros microorganismos potencialmente infecciosos para el ser humano y convertirlas en resistentes.

a�?El mal uso genera resistencia en plazos muy cortos, debido a la gran capacidad de replicaciA?n de las bacteriasa�? seA�ala a Sinc Rafael CantA?n, jefe del Servicio de MicrobiologA�a del Instituto RamA?n y Cajal de InvestigaciA?n Sanitaria. a�?La antibioterapia moderna arranca durante la Segunda Guerra Mundial y, 70 aA�os despuA�s, hemos sido capaces de crear muchos antibiA?ticos de solo unas pocas familias. Hoy en dA�a ninguno de ellos escapa a los mecanismos de resistencia, incluso algunos han dejado de utilizarsea�?, aA�ade.

Tanto el nuevo premio Longitud, que mantiene el nombre original, como el premio de la ComisiA?n Europea, recompensarA?n a quien desarrolle una prueba para diagnosticar infecciones que se pueda utilizar en el punto de atenciA?n al paciente. a�?La prueba debe ser precisa, rA?pida, asequible, fA?cil de usar y disponible para cualquiera en cualquier parte del mundo. Debe identificar cuA?ndo es necesario el uso de antibiA?ticos y, en caso de serlo, indicar cuA?les usara�?, tal y como indican las normas del certamen organizado por Nesta.

a�?Los premios de estA�mulo tienen que ser cuidadosamente diseA�ados para que tengan una meta clara y sean atractivos a los participantes. Hemos consultado a unos 200 expertos en ciencia, ingenierA�a y ciencias sociales, asA� como al pA?blico en varias fases para definir un desafA�o dentro del A?rea de la resistencia a antibiA?ticosa�?, seA�ala a Sinc Tamar Ghosh, que lidera el proyecto.

Por su parte, GonzA?lez Zorn coincide en que el desarrollo de test diagnA?sticos especA�ficos a�?es una buena herramienta. Si diagnosticamos antes y mA?s especA�ficamente las patologA�as, podremos actuar antes y mA?s especA�ficamente, en lugar de utilizar molA�culas de amplio espectro contra bacterias que no sabemos exactamente cuA?les sona�?.

AdemA?s, los creadores del premio aseguran que este tipo de pruebas pueden servir para comprender mejor los mecanismos de resistencia de los patA?genos. a�?Una de las barreras que impiden saber mA?s es la ausencia de datos. Estas herramientas de diagnA?stico pueden ayudar, ya que suponen una forma fiable de recopilar datos de todo el mundo. Cada vez que se hace una prueba, hay un nuevo dato almacenado, lo que proporciona una gran cantidad de nueva informaciA?n para comprender cA?mo se produce la resistenciaa�?, seA�ala Ghosh.

Sin embargo, existen otras muchas formas de abordar el asunto. Las mA?s bA?sicas son la educaciA?n y la concienciaciA?n de pacientes y profesionales capacitados para prescribir antibiA?ticos a��mA�dicos, odontA?logos y veterinariosa��.
TambiA�n reducirA�a el problema cumplir ciertas normas higiA�nicas: a�?Hay hospitales en los que se ha reducido la resistencia a antibiA?ticos hasta en un 30% solamente por recordar que hay que lavarse las manos, cambiarse la bata, etc.a�?, explica GonzA?lez Zorn.

a�?Ahora estamos dispuestos a asumir la toxicidad de antibiA?ticos rechazados en los aA�os 60 para poder curar a la gentea�?, puntualiza GonzA?lez Zorn.

En algunos paA�ses se han llevado a cabo iniciativas para incentivar el desarrollo de nuevos antibiA?ticos, tal y como indica GonzA?lez Zorn: a�?En Estados Unidos existe una estrategia que facilita y acelera los trA?mites a los investigadores que vayan a desarrollar un antibacteriano, eliminando ciertas trabas legales y burocrA?ticas a la hora de realizar el ensayo clA�nicoa�?.

Por otro lado, existen alternativas a la creaciA?n de antimicrobianos nuevos. Para este investigador, a�?hoy en dA�a hay algunas aproximaciones originales enfocadas a actuar contra la evoluciA?n de las bacteriasa�?. El propio GonzA?lez Zorn participa en proyectos de este tipo, donde lo que se hace es a�?tratar de impedir la transferencia de ADN de una bacteria a otra, desarrollar molA�culas anticaptaciA?n de genes de resistencia o molA�culas antimutaciA?n, que ralentizan la capacidad mutacional o evolutiva de las bacteriasa�?, segA?n comenta.

A las farmacA�uticas no suele resultarles rentable invertir en un medicamento que estA? abocado a resultar ineficaz en poco tiempo. Otras opciones son el uso de bacteriA?fagos A�a��virus que infectan a las bacteriasA�a�� o la fabricaciA?n de vacunas. a�?Las vacunas son la soluciA?n ideal, porque si evitas que aparezca la infecciA?n, evitas el uso de antibiA?ticos. El problema tambiA�n tiene un componente medioambiental, ya que los antibiA?ticos pueden acabar contaminando el agua, el suelo y el aire, y provocar que las poblaciones bacterianas de estos entornos desarrollen resistencia. Por eso es importante crear molA�culas que faciliten la absorciA?n total del antibiA?tico en el intestino grueso, o que se degraden fA?cilmente en el entorno.
Al tratarse de un asunto cientA�fico multidisciplinar, GonzA?lez Zorn cree que la aproximaciA?n mA?s apropiada para buscar soluciones debe ser de tipo de salud A?nica, es decir, que involucre a profesionales de la medicina, la veterinaria y las ciencias medioambientales de manera conjunta. a�?Esto se ha empezado a hacer desde hace tan solo unos aA�os. Hasta entonces se tendA�a a discutir sobre quA� sector contribuA�a mA?s a la apariciA?n de resistencia a antibiA?ticosa�?, seA�ala el experto.

La UniA?n Europea tiene en marcha un proyecto que coordina a los paA�ses europeos a la hora de financiar y afrontar distintos retos que no pueden ser resueltos por un solo estado de manera individual. En este caso tambiA�n se apuesta por un enfoque multidimensional. Ya se han identificado seis pilares prioritarios para hacer frente al problema: buscar nuevos y mejores antibiA?ticos o tratamientos alternativos; mejorar las herramientas diagnA?sticas; establecer programas de vigilancia; comprender los mecanismos de transmisiA?n de resistencia entre bacterias; minimizar la contaminaciA?n ambiental por antibiA?ticos y bacterias resistentes; y estudiar las intervenciones preventivas y de control.