Investigadores piden asesorar a la AdministraciA?n en polA�tica cientA�fica

Octubre 2014.- Investigadores reunidos en el ‘IV Foro de Ciencia’, organizado por la FundaciA?n Lilly, han destacado la necesidad de asesorar a la AdministraciA?n en polA�tica cientA�fica a travA�s de estructuras independientes, asA� como de «atraer» talento, tener una Estrategia Nacional de I+D y definir criterios de evaluaciA?n y priorizaciA?n.

«Es obvio que es necesario que las inversiones en I+D se vayan acercando a la media europea, pero no es la A?nica dificultad. El problema de fondo es cultural. Aunque ya no decimos ‘que inventen ellos’, en investigaciA?n pocas veces llevamos la iniciativa. Tenemos que aprender de los grupos que han sido capaces de liderar proyectos internacionales», ha comentado el director de la FundaciA?n Lilly, JosA� Antonio SacristA?n.

Un ejemplo de ello, es el Centro de RegulaciA?n GenA?mica, dirigido por Luis Serrano, que anualmente logra entre 4 y 5 patentes y tiene numerosos acuerdos de colaboraciA?n con empresas. Entre los aspectos que este experto ha seA�alado para lograr ser un caso de excelencia, destaca una financiaciA?n «sA?lida» de la Generalitat, un estructura no funcionarial y «muy eficiente», investigadores de «renombre» capaces de atraer talento joven y, sobre todo, la vocaciA?n de competir a nivel mundial.

En este sentido, el fundador y presidente de la Comunidad de CientA�ficos EspaA�oles en el Reino Unido, Lorenzo Melchor, ha avisado de la dificultad que tiene EspaA�a para atraer talento debido, entre otros motivos, a la «falta de oportunidades» que tienen los profesionales en el paA�s.

«No hay que olvidar la importancia de la bA?squeda de laboratorios lA�deres por parte del investigador espaA�ol, que opta por un paA�s con un nivel cientA�fico puntero. En EspaA�a existen islas de excelencia establecidas en los A?ltimos 15 aA�os, como el Centro Nacional de Investigaciones OncolA?gicas (CNIO) y el Centro de RegulaciA?n GenA?mica (CRG), que atraen talento, pero la calidad media no es tan buena como la del Reino Unido», ha apostillado.

Asimismo, a juicio del presidente de la ConfederaciA?n de Sociedades CientA�ficas de EspaA�a (COSCE), Carlos Andradas, parte de la situaciA?n de la investigaciA?n en EspaA�a se debe a las caracterA�sticas de su tejido empresarial, con «muchas compaA�A�as pequeA�as que no pueden hacer I+D».

La soluciA?n, prosigue, podrA�a ser juntar a actores pA?blicos y privados para lograr que las empresas sA� puedan invertir en I+D. «Se insiste mucho en alcanzar la excelencia, pero A�sta representa la cA?spide de una pirA?mide que necesita una base sA?lida. Sin esa base, ese tejido investigador, no habrA? excelencia», ha seA�alado.

Otra de las oportunidades que Andradas cree que EspaA�a tiene para hacerse mA?s fuerte en I+D proviene de focalizar los sectores por los que hay que apostar. Entre los ejemplos, ha apuntado a los sectores energA�ticos, agroalimentarios y sanitarios.

AdemA?s, en su opiniA?n, ahora mismo «falta un convencimiento», especialmente entre la clase polA�tica acerca de la importancia de la I+D en EspaA�a. «Eso se traslada al tejido social, porque la gente valora la ciencia, pero de forma romA?ntica, porque la ve alejada del dA�a a dA�a. Hay que llevar a cabo un cambio que haga que se perciba la importancia de la investigaciA?n», ha apostillado.

«Conseguir que la investigaciA?n se traduzca en beneficios para la sociedad, bien en salud o en recuperaciA?n econA?mica, es precisamente uno de los retos de los centros y que todavA�a no estA? suficientemente desarrollado. Para ello, hay que crear estructuras que permitan hacer transferencia, y eso requiere un cambio en los criterios de evaluaciA?n y priorizaciA?n e impulsar un cambio de mentalidad que pasa por que el investigador proyecte en la sociedad las posibilidades que tiene lo que hace», ha seA�alado.

Respecto a los recortes en ciencia, Melchor ha pedido a la sociedad que los denuncie tal y como hacen con la sanidad o la educaciA?n ya que, tal y como ha recordado, invertir en ciencia hoy es conseguir una «mejor medicina para maA�ana».

No obstante, el fundador y presidente de la Comunidad de CientA�ficos EspaA�oles en el Reino Unido ha reconocido que los cientA�ficos deben implicarse «mA?s» y que han dejado «todo el peso en manos de ciclos polA�ticos».

«Necesitamos estructuras autA?nomas que puedan gestionar con independencia de estos ciclos. En EspaA�a no hay instituciones tan orientadas a la sociedad como la Academia de las Ciencias en Estados Unidos o la Royal Society en el Reino Unido, es decir, que funcionen de forma transversal y presenten a la sociedad los beneficios que la I+D aportarA�a», ha argumentado.

Dicho esto, ha pedido tender puentes entre polA�ticos y cientA�ficos, creando un Consejo de PolA�tica CientA�fica formado por cientA�ficos que asesoren a la AdministraciA?n con independencia del color polA�tico, de forma que A�stos tomen mA?s decisiones basadas en la evidencia cientA�fica.