Tabaco y pancreas

Diversas investigaciones han mostrado ya que el tabaco puede tener efectos sobre el pA?ncreas «mA?s graves» que el alcohol o actuar como acelerador de su deterioro, segA?n se ha puesto de manifiesto en la sesiA?n ‘Retos de la PancreatologA�a 2016’, celebrada en el marco del congreso de la Semana de las Enfermedades Digestivas. En EspaA�a unos 23.500 pacientes sufren pancreatitis crA?nica y, cada aA�o, se diagnostican alrededor de 2.500 nuevos pacientes de esta patologA�a digestiva grave, con tratamiento limitado y mortalidad elevada si el diagnA?stico no se realiza en un estadio precoz.

La pancreatitis crA?nica ha sido clA?sicamente relacionada con el consumo de alcohol, considerando que a mayor consumo de alcohol mayor riesgo de desarrollar la enfermedad. Sin embargo, en los A?ltimos aA�os, la investigaciA?n cientA�fica ha demostrado que personas sin un alto nivel de consumo de alcohol tambiA�n pueden desarrollar pancreatitis crA?nica.

«Este hallazgo nos ha llevado a la conclusiA?n de que lo que define un mayor o menor riesgo de pancreatitis es la predisposiciA?n genA�tica del paciente a padecer la enfermedad, ademA?s del alcohol consumido», ha explicado el Jefe del servicio de Aparato Digestivo del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago, Enrique DomA�nguez MuA�oz.

En este sentido, el experto ha destacado la importancia que tiene para los especialistas el conocimiento de otros factores de riesgo para la pancreatitis crA?nica porque se abren «nuevas perspectivas» a tener en cuenta tanto en el diagnA?stico de la enfermedad como en el tratamiento de su causa.

Concretamente, en los A?ltimos aA�os, tambiA�n se han publicado estudios sobre los efectos del tabaco sobre el pA?ncreas con independencia del consumo del alcohol. Los resultados muestran que el tabaco es al menos tan tA?xico como el alcohol para el pA?ncreas y, sobre todo, que acelera la progresiA?n de la enfermedad. Y es que, el tabaco favorece la producciA?n de tejido fibrA?tico y el riesgo del posterior desarrollo de cA?ncer de pA?ncreas.

Este nuevo escenario proporciona a los especialistas de aparato digestivo nuevas oportunidades terapA�uticas. El tratamiento clA?sico de la pancreatitis crA?nica se basa en la administraciA?n de insulina en los casos que desarrollan una diabetes y la administraciA?n, con las comidas, de fA?rmacos que contienen las enzimas pancreA?ticas que el propio A?rgano no es capaz de producir.

«El tratamiento tradicional consistA�a en tratar los sA�ntomas y actuar ante las complicaciones. Ahora el concepto ha cambiado y buscamos frenar la progresiA?n de la enfermedad», ha recalcado DomA�nguez MuA�oz.

La primera medida es atacar las causas de la enfermedad, es decir, aquello que produce la inflamaciA?n crA?nica del pA?ncreas. El alcohol y el tabaco, o ambos, son la causa de entre el 75 por ciento y el 80 por ciento de los casos de pancreatitis crA?nica, por lo que la primera medida que el paciente debe adoptar es la abstinencia de ambos tA?xicos.

«Los estudios nos han mostrado que cuando el paciente deja de beber y de fumar completamente y somos capaces de llegar a un diagnA?stico en etapas tempranas de la enfermedad, A�sta se detiene y asA� se evita el desarrollo de complicaciones. Pero el abandono de tabaco y alcohol debe ser total, no es suficiente disminuir su consumo», ha apostillado el experto.

El siguiente paso para inactivar la enfermedad pueden ser los nuevos tratamientos con antioxidantes, compuestos que pueden inactivar las cA�lulas que producen la cicatrizaciA?n y fibrosis de los tejidos del pA?ncreas. «AsA�, podemos detener el proceso por el cual se destruye el tejido funcional pancreA?tico y se sustituye por tejido fibroso. Conocer mA?s y mejor cA?mo funciona el pA?ncreas nos proporciona avances importantes que facilitan el control de una enfermedad crA?nica que hasta ahora tenA�a un tratamiento limitado, basado no en resolver la enfermedad sino en dar respuesta a las complicaciones que provoca», ha zanjado DomA�nguez MuA�oz.